La medicina avanza de manera desmesurada día a día, para ofrecerle cura a millones de enfermedades y calidad de vida a cada uno de sus padecientes.

En esta lucha por conseguir los tratamientos y terapias más seguros y efectivos para tratar cada condición, es que se comienzan a hacer pruebas con diferentes tipos de elementos, que de una manera u otra, prometan solucionar las mil incógnitas que guarda esta ciencia; en este orden de ideas, y en la búsqueda de nuevos procedimientos, es que conseguimos las ya sonadas terapias a base de ozono.

El ozono (O3), es una compuesto químico, formado por un átomo de oxigeno, añadido a la molécula ya existente de oxigeno anterior (O2), creando una molécula nueva inestable, que busca enlazarse con otros elementos.

De una manera menos teórica, se puede describir el ozono, como un gas azulado, inodoro, que entre sus propiedades está la de actuar como escudo protector ante la radiación, y por sus principios químicos, de igual manera puede purificar elementos como el agua.

Resultado de imagen de ozonoterapia

Este compuesto químico, se ha sometido a un sinfín de estudios científicos, con el fin de aplicar sus propiedades para la sanación de diversas enfermedades; conociendo este proceso como ozonoterapia.

La ozonoterapia es un procedimiento medico, alternativo y no invasivo que se apoya en el ozono, como agente medicinal en un gran número de condiciones, siendo una de las terapias preferidas por los pacientes, por sus pocos efectos secundarios y casi nulas contraindicaciones.

Esta se obtiene a partir del oxigeno en su manera pura, y con las herramientas de laboratorio adecuadas, se genera un ozono totalmente natural, adecuado para el uso humano.

Las terapias a base de ozono, pueden ser administradas de manera local, intravenosa o intramuscular, dependiendo de la decisión del médico tratante, y es un procedimiento que se debe aplicar de manera controlada por un profesional.

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Igualmente se puede administrar de manera externa, con un empaque plástico hermético, se pone el gas en contacto directo con la zona afectada para tratar heridas, llagas y ulceras.

Esta maravillosa terapia, se basa en un compuesto de ozono que al ponerse en contacto con la sangre, genera un proceso muy parecido al que se logra a partir con el mismo compuesto, para la purificación del agua, y es que reacciona con los ácidos grasos insaturados, mediante un proceso químico, modificándolos de manera que consigue peróxidos.

¿QUE TIPO DE MALES SE PUEDEN TRATAR CON OZONOTERAPIA?

  • Pie diabético: se suele colocar de manera externa y tiene un efecto casi inmediato en ulceras o llagas, y es que luego de su aplicación, el tiempo de cicatrización suele ser mínimo.
  • Problemas circulatorios: actúa directamente en los glóbulos rojos, generando elasticidad, lo que permite amplificar el proceso de microcircuacion, sin contar con que la concentración de oxigeno se ve beneficiada.
  • Pacientes con gastritis: estos se ven beneficiados con la ozonoterapia, para suplir los fármacos que están contraindicados para su condición.
  • Desintoxicación del hígado: entre sus beneficios, figura el de ayudar a liberar toxinas y tóxicos del organismo.
  • Migraña: para este tipo de cefaleas se suele aplicar la ozonoterapia de manera subcutánea, y promete resultados inmediatos y duraderos, sin efectos secundarios.

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  • Hepatitis c: este virus cuenta con un porcentaje de mutación muy altos, por lo que los la terapia con ozono, por el alto nivel de energía que contiene en cada célula, suele ser altamente recomendado.
  • Insomnio: está científicamente demostrado que el ozono tiene un nivel alto de efecto en algunos neurotransmisores, lo que lo convierte en un neuromodulador que promete mejorar la calidad de vida de quienes padecen insomnios.
  • Antibactericida: esta molécula libera una sustancia en el organismo que destruye de manera efectiva, virus, bacterias y cándidas

Así que no esperes mas infórmate y trátate a tiempo, cada día es más fácil.

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